Correr al mediodía en otoño

Tanto ayer como hoy he vuelto a tener la excelente sensación de correr sin calor al mediodía, antes de comer. Las mejores fechas para esto son el otoño, el invierno y el comienzo de la primavera, fechas en que la temperatura no pasa de 20 grados y, a veces, el sol puede hacerte algo de compañía.

Ayer fueron 63 minutos de carrera lenta, de los cuales unos 40 fueron sobre carril de tierra. Esto lo he notado hoy dado que no me dolía ni un solo músculo de las piernas. ¡¡Qué diferencia en el día después tras un día de carrera sobre asfalto!!. Y hoy han sido 72 minutos, mismo recorrido, 50 minutos sobre tierra.

No hay carreras a la vista, finalmente no iré al Trofeo Akiles (no me encuentro suficientemente motivado para afrontar una carrera). Además, quiero consolidar el ritmo de entrenamientos, y quiero añadir un día semanal a éstos.

Posiblemente, el sábado 1 de diciembre me sume a la entretapia que hay programada en el Cerro de los Ángeles. Pero sólo para entrenar en compañía. Después tengo que salir echando leches de vuelta a Valdemoro. Todo depende de qué planes haya para ese día. Espero que no se pasen de 15 kilómetros :)

Puedo estar contento con los últimos casi tres meses, en los que he recuperado las ganas de ponerme las zapatillas. Aún es pronto, pero poco a poco, conseguiré alcanzar un nivel aceptable de forma para afrontar las carreras.

Nos vemos en los bares.

Luis.